Entrevista

C. ESENCIA HUMANA

C-01 Prescindiendo de que crea o no crea, ¿qué entiende Vd. por la palabra DIOS? Vitalmente me es imposible prescindir de la Fe. En el orden del pensamiento, puedo pensar racionalmente en Dios, y en este sentido, porque llevo muchos años estudiando y pensando en los temas metafísicos, puedo decir que me siento integrado en la gran tradición de la metafísica cristiana, que ve a Dios, desde nuestros conceptos racionales, como Aquel que es el ser infinitamente perfecto y, por tanto, viviente eterno, con inteligencia infinita y amor infinito; ser, vida, conocimiento, amor. Es el Ser infinito y la explicación absoluta de todo.

C-02 ¿Cree en Dios? Sí, ciertamente. Gracias a Dios.

C-03 ¿Qué razón atribuye Vd. al hecho de que desde siempre el Ser Humano de casi todos los pueblos y civilizaciones ha tenido presente de alguna manera la existencia de un Más Allá y de un Dios o Fuerza Superior? Esta dependencia y esta conciencia del principio creador fundante pertenece a la estructura ontológica del hombre. Kierkegaard, en una obra titulada «La enfermedad mortal», que es continuación de «La Angustia», nota la inautenticidad de toda existencia humana que se empeña en querer tener conciencia de sí como desligada del poder creador. Esta voluntad de pretender desligarse de Dios es un modo de inauténtica existencia humana; me parece absolutamente válida su afirmación.

C-04 ¿Se puede amar a Dios y odiar (no se pregunta «prescindir») a la Religión? ¿Por qué? La religión es el culto, es la actitud de reconocimiento, de dependencia y acatamiento a Dios como legislador, pero no hay antítesis, aunque algunos la hayan querido buscar, entre actitud religiosa y amor a Dios; va ligado. Así como en el amor humano nadie diría que la amistad o el amor conyugal excluye la relación de respeto, tampoco se puede decir que el amor a Dios haga que el hombre se sienta liberado de la actitud religiosa; es contradictorio que no sienta a Dios como digno de ser honrado y obedecido. El amor a Dios incluye la religiosidad.

– Pero ¿no puede una persona que ame a Dios, estar en contra de los ritos y prácticas concretas dirigidas e interpretadas por los que dicen ser representantes de la relación con Dios, por no estar de acuerdo con ellos? Entonces la pregunta no se refiere al odiar la «actitud religiosa». Si aquí, en lugar de decir «la religión», dijésemos «el fariseísmo» o «la hipocresía» , entonces ciertamente se puede amar a Dios y condenar la hipocresía o la superstición. Ahora, la actitud religiosa es consustancial con el estar amando a Dios.

C-05 Sobre la persona histórica de Jesucristo, ¿cuál cree que fue su realidad? Creo que fue históricamente la figura humana de Jesús de Nazaret, que era el Hijo de Dios hecho hombre para salvar al ser humano. Esta es la perspectiva de la Fe cristiana, que no puede dejar como no interesante el carácter histórico de Jesucristo. Algunos teólogos han dicho que en la perspectiva de la Fe, el problema del Jesús histórico carecía de interés; ha habido algún pensador alemán que incluso ha dicho que al propio apóstol Pablo no le interesaba el Jesús histórico, sino sólo el Cristo de la Fe. Pero esto es absolutamente contradictorio con toda la historia de la evangelización paulina y con sus propios textos; precisamente la fórmula más breve de lo que se llama «Kerigma apostólico» está en la carta a Timoteo que dice: «-Acuérdate de Jesucristo, resucitado de entre los muertos, nacido del linaje de David-«, o sea, la historicidad está absolutamente relacionada con la Fe cristiana.

C-06 La Iglesia, ¿es producto de Dios y es Él quién la dirige, o es producto del Hombre pretendiendo dar continuidad a un ejemplo divino? La Iglesia tiene, en su origen y en su esencia interna, una originación divina. Lo que pasa es que ha sido fundada precisamente como una convocación de hombres a los que se les ha dado una misión; de modo que hay una serie de elementos humanos que deben estar en la Iglesia, hecho que forma parte de la naturaleza misma de la Iglesia, que es a la vez divina y humana, orientada a la eternidad y viviendo en el tiempo. Así pues, en la Iglesia hay legislación canónica, hay instituciones y familias religiosas, determinaciones rituales, etc., que son establecidas por la Iglesia misma como institución. Pero esto pertenece a la misma naturaleza del designio de la Encarnación. No es antitético.

C-07 ¿Puede el Ser Humano por sí solo realizarse satisfactoria y plenamente como tal, o necesita ser consciente de su incapacidad y proyectar su mente a otra Superior para poder realizar la vida de la forma más plena? Creo que a esta pregunta he contestado antes al aludir a la existencia inauténtica que supone para el hombre la voluntad de concienciarse desligado a Dios. Así pues, me ratifico en lo dicho en la pregunta C-03.

C-08 ¿Qué valores cree que aporta la Filosofía Oriental a nuestra Sociedad Occidental actual, que justifiquen el seguimiento que ha inspirado? Yo creo que aquí hay un doble plano. Por una parte, el estudio de toda filosofía siempre tiene un interés cultural y, por supuesto, filosófico. De todos modos creo que la pregunta se refiere a otro aspecto que está ocurriendo, como es la búsqueda de los movimientos de tipo teosófico, casi mágico, de ciertos misticismos que, como en la misma práctica del yoga, buscan ciertas posiciones cuasi hinduistas, etc. y yo creo que esto viene del vacío espiritual que se está creando en la decadencia de Occidente como sociedad cristiana. Yo veo en esto un paralelismo con la decadencia de la cultura clásica; cuando estaba quebrando el sincretismo del paganismo romano, aparecieron multitud de religiones mistéricas y de sectas religiosas que disputaban el terreno al cristianismo que se estaba expansionando. En aquella ocasión -siglo II y III- el cristianismo triunfó, cuando aparecía como una de tantas alternativas. Ahora la sociedad occidental, que evidentemente nació de la Fe cristiana, como factor religioso determinante de la posibilidad misma de la cristiandad accidentar, está en una actitud religiosa completamente en decadencia e involucionista; se está pasando aun secularismo, cuando el hombre no puede vivir sin conciencia de trascendencia. Y los que creen ya superada o excluida la opción cristiana pero siguen teniendo esta conciencia de trascendencia, buscan en estos misticismos orientales un sucedáneo. De aquí la abundancia y proliferación de sectas.

C-09 ¿Cree Vd. que los animales, respetando las diferencias fundamentales manifiestas en vida, tienen también si la tenemos nosotros, su continuidad energética, su «alma imperecedera»? Creo que no. Porque la continuidad de la vida humana no es algo que esté en la línea energética biológica, sino que es algo que se funda en la espiritualidad del alma humana. Por tanto no tiene por qué haber permanencia de la vida animal después de la muerte.

C-10 ¿Cree que la inteligencIa es la esencia del Ser Humano? Si es así, ¿un disminuido mental agudo es para Vd. «menos Ser Humano»? La inteligencia pertenece a la naturaleza del hombre, porque el alma es espiritual. No se puede definir al hombre como ser racional y personal desde la capacidad y desde el acto de pensar, ni desde la conciencia, ni tampoco desde la capacidad y desde el ejercicio de la libertad. Se tiene que decir que por ser hombre es constitutivamente capaz de pensamiento racional y de lenguaje comunicativo racional, y que por ser hombre tiene dominio de sus actos; por ser un ser personal es un sujeto libre. Pero inteligencia y libertad se fundan en el modo de tener, el ser, una substancia espiritual. La persona se constituye desde la participación, de una forma heterogénea a la de los entes no personales, en el ser mismo. En este sentido es hombre incluso el que nunca hubiese podido llegar a ejercer actos intelectuales; tiene aquella naturaleza que, salvo lesión orgánica o salvo impedimento circunstancial, de suyo sería capaz de vida personal.

C-11 Si pudiera y le obligaran, ¿qué elegiría para sus hijosentre estas dos únicas alternativas?: – Honestidad y pobreza con paz interior. – Deshonestidad y riqueza con paz interior. Elegiría la primera decididamente. Porque además la segunda alternativa es para mí lo más opuesto que podría ser de la primera. Ser deshonesto, tener paz interior y si encima se tiene riqueza, es lo peor que le puede pasar a una persona, porque se endurecerá más en conservar la paz con la deshonestidad. Una persona que sea capaz de tener paz siendo deshonesto, si además es rico, creo que en el plano moral es la peor situación en la que se puede encontrar, por ser la de más difícil salida.

C-1 2 ¿Considera justo el derecho al Suicidio? ¿Y a la Eutanasia? No, en absoluto. El trágico hecho de que comiencen a darse suicidios en niños de doce años es un síntoma espantoso de la situación de eSta pésima educación que actualmente se está dando. La eutanasia por desgracia, por el camino que vamos va viniendo, y ya antes he aludido a ella. No hay derecho a la eutanasia.

– ¿Y la eutanasia en el sentido de la «muerte digna»? Aquí hay un riesgo de equívoco muy grave, por lo que prefiero no hablar de este tema para evitar confusiones.

C-13 Si Vd. hubiera nacido en lugar de Hitler, con idénticas características biológicas y ambientales, ¿cree Vd. que la Historia podría haber sido diferente? ¿Qué tipo de actos humanos pues son auténticamente libres? Responderé a la segunda parte de la pregunta, porque ésta sí tiene sentido. Son auténticamente libres los actos realizados con conciencia y, por tanto, en la capacidad de deliberación sobre la ordenación de los medios a los fines, etc.; si no no hay libertad. Pero a la primera parte de la pregunta no puedo contestar porque creo que no tiene sentido plantear esta hipótesis de haber nacido en lugar de otro, ya que cada uno es en sí mismo hijo de sus padres. La individuación humana, que es un misterio muy notable, está totalmente vinculada anuestra dependencia genealógica. Uno se puede plantear la hipótesis de haber nacido de los mismos padres, por supuesto, pero en otro lugar, pues eso sí que podría haber ocurrido. Pero no puedo plantearme haber nacido de otros padres, porque no sería yo, y portanto no es admisible este supuesto.

– Con esta hipótesis se pretende aislar «visualmente» el acto humano libre de la determinación de sus condicionamientos de cualquier naturaleza, si es que es aislable, al menos en alguna medida, para así poder defender la capacidad de libertad por encima del condicionamiento. Es posible que a veces pensemos que el prójimo obra libremente cuanto obra cuasi reflexológicamente condicionado, es posible. Sobre todo en estos tiempos en los que hay tantas presiones del ambiente y tan pocas ocasiones de auténtica conciencia y reflexión; yo pienso que a muchos adolescentes se les ha educado tan poco para la reflexión que es posible que no realicen «actos humanos»;… ¡terrible esto! Y más por una razón de presión social que de por herencia biológica. Pero el tema del determinismo biológico sugerido en la pregunta, tomado de forma absoluta, para mí es una posición errónea. Ahora, el análisis de hasta qué punto la influencia de la herencia en una persona concreta le condiciona, es difícil en cada caso. No hay respuesta caracterizada. Pero niego sentido a la hipótesis de que yo haya nacido en lugar de Hitler, porque cada uno es hijo de sus padres.

C-14 Respecto a la existencia en nuestro Universo de otros seres con similar o superior inteligencia a la nuestra, si Vd. tuviera que apostar SI o NO a su existencia con la intención de acertar, ¿a qué apostaría y por qué? Yo apostaría negativamente, a pesar de la inmensidad del Universo material. No encuentro ninguna razón filosófica, ni teológica, ni religiosa para suponer que no pueda ser, diríamos ontológicamente, el centro del Universo este planeta nuestro, precisamente porque en él está el hombre, y que fuese el único en el que hubiesen estos seres. Podría ser; yo me inclino a esta solución. No tengo ninguna convicción absoluta, pero apostaría negativamente. No es absurdo pensar que todo el Universo está hecho para el hombre, y que el hombre está en la Tierra. Es tan grande el hombre aunque esté en un rincón del Universo, que no es absurdo pensarlo así.

C-15 ¿Qué es para Vd. La Vida? De la vida se suele hablar más ahora en el sentido de una sucesión de actos a lo largo del tiempo, de una actualidad de actos, en un sentido como constituida por la praxis y por la acción. Veo todo esto enraizado en un nivel de ser. El hombre es un viviente que tiene el ser espiritual, capaz de conciencia y racionalidad, capaz del dominio de sus actos, dotado, por tanto, de eticidad, de historia, de sociedad, de cultura, de religión; todo eso pertenece al modo de ser del hombre. La vida, por decirlo en terminología sintética y conceptualmente rigurosa, es un nivel de participación en el ser. La vida es un nivel más perfecto que el del no viviente de participación en el ser, y la vida humana es el nivel más excelente que conocemos, en el universo de la experiencia, de participación en el ser.

C-1 6 ¿Qué valor tiene para Vd. la Ancianidad? Es algo que va viniendo y que puede ir haciendo problemático el pensar qué se podrá ir haciendo a medida de ir siendo más anciano. Recordando los ancianos que yo he conocido he visto que, en muchos casos, en la ancianidad se realiza la máxima fecundidad espiritual e intelectual. Si no hay enfermedad que lo impida, un hombre maduro y profundo en la ancianidad puede dar de sí y aportar muchísimo al bien de otros. No es la época de plenitud, pero en cierto sentido es una época también de plenitud y de consumación. Puede ser, en algunas dimensiones, más plena que la edad adulta. Esto lo he comprobado en ancianos que han sido maestros míos o en familiares, como mi madre, etc.

C-17 ¿Qué cree que es la Muerte: el final absoluto o el final de una etapa con un cambio a qué? Por todo lo dicho anteriormente, para quien afirma racionalmente, y también en el contexto de la Fe revelada, la espiritualidad y la inmortalidad del alma, la muerte se ve, como en la perspectiva cristiana, como el fin de la vida humana en el universo de la inmanecencia, del tiempo, del tránsito y como el paso a la vida eterna.

C-18 ¿Puede explicarnos la ocasión en la que recuerde haberse reído más? Podría recordar una anécdota concreta de una determinada conversación, pero prefiero no concretarme simplemente en la anécdota aquélla y sí extraer la moraleja general del tema. A mí lo que me da más risa es la actual tendencia a la predicación moral hecha por quienes sostienen que el lenguaje moral carece de sentido; que el hombre no tiene libre albedrío; que la conciencia del mal moral es un efecto de la ignorancia, que una vez adquirida por la moderna psicología y por las escuelas psicoanalíticas (la conciencia del determinismo, la conciencia porel subconsciente), entonces vemos que carece de sentido, etc. Porque en toda clase dirigente occidental actual, quienes en su convicción filosófica dan más por cancelada la doctrina del libre albedrío y de la responsabilidad moral, son los que, con mayor frecuencia e insistencia, están condenando éticamente al prójimo por razones políticas, sociales, etc. Es decir, encuentro divertido lo que yo llamo el fariseísmo secularizado: se expresan constantes condenaciones morales y predicaciones por personas que si les interrogasen sobre qué piensan sobre el lenguaje moral, dirían que es puramente ilusorio o emocional, y si les preguntasen sobre la responsabilidad moral dirían que es una superstición del pasado. Esto es lo que me suele divertir más, porque con poner el telediario y oír al Alfonso Guerra, ya te diviertes, no?

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