Vitalmente me es imposible prescindir de la Fe. En el orden del pensamiento, puedo pensar racionalmente en Dios, y en este sentido, porque llevo muchos años estudiando y pensando en los temas metafísicos, puedo decir que me siento integrado en la gran tradición de la metafísica cristiana, que ve a Dios, desde nuestros conceptos racionales, como Aquel que es el ser infinitamente perfecto y, por tanto, viviente eterno, con inteligencia infinita y amor infinito; ser, vida, conocimiento, amor. Es el Ser infinito y la explicación absoluta de todo.